Contenidos de la página
- 1 ¿Merece la pena reformar para vender o alquilar una casa?
- 1.1 ¿Por qué reformar una vivienda puede ser una inversión rentable?
- 1.2 ¿Qué tener en cuenta al reformar una vivienda para vender o alquilar?
- 1.3 Claves para revalorizar una vivienda con una reforma para venderla
- 1.4 Claves para reformar una vivienda para alquilarla a un mayor precio
- 1.5 ¿Cuánto dinero puedo ganar si hago una reforma para vender o alquilar?
Si eres propietario de una vivienda antigua o en mal estado que no está dando rendimientos económicos seguramente estés pensando en alguna manera de cambiar eso. Ya sea vendiendo o alquilando, es lógico ya que, de otro modo, solo generará gastos. En este sentido, se habla mucho sobre si merece la pena reformar la vivienda para que al venderla o alquilarla se obtengan más beneficios. Existen varios factores positivos y negativos al respecto, así que vamos a analizarlos para que puedas determinar si te conviene o no realizar esa inversión.
¿Por qué reformar una vivienda puede ser una inversión rentable?
Reformar una vivienda no solo mejora su estética y funcionalidad, sino que también puede convertirse en una de las decisiones más rentables para los propietarios. Ya sea para vender o alquilar, una reforma bien planificada puede incrementar significativamente el valor de la propiedad y hacerla más atractiva para potenciales compradores o inquilinos.
Entre las principales razones por las que reformar una vivienda resulta rentable destacan:
- Incremento del valor de mercado: Las mejoras en cocina, baño y aislamiento térmico suelen aumentar el precio de venta o alquiler en porcentajes superiores al costo de la inversión inicial.
- Mayor rapidez en la venta o alquiler: Las propiedades reformadas suelen captar más interés, reduciendo el tiempo en el mercado.
- Atractivo frente a la competencia: Una vivienda reformada destaca frente a otras opciones disponibles, especialmente en zonas con alta oferta inmobiliaria.
- Reducción de gastos futuros: Reformar para mejorar la eficiencia energética, como instalar ventanas de doble acristalamiento o paneles solares, no solo agrega valor, sino que también reduce costos a largo plazo para los nuevos ocupantes.
Si la reforma se planifica correctamente, seleccionando las áreas más estratégicas y alineándola con las necesidades del mercado, puede convertirse en una inversión que no solo recupera su costo, sino que genera un retorno significativo.
¿Qué tener en cuenta al reformar una vivienda para vender o alquilar?
Los principales factores que se deben valorar antes de reformar una propiedad con el objetivo de aumentar su precio son los siguientes:
- El precio original de la casa.
- La ubicación de la vivienda y la demanda.
- Las posibilidades reales del inmueble.
- La calidad de la reforma.
El precio original de la casa
Como es lógico, la base de cualquier buena inversión es el porcentaje de beneficio que vas a obtener. En este sentido, el precio de compra del inmueble que quieras reformar será una buena vara de medir para saber si merece la pena hacer obras. Así pues, pueden darse varios escenarios:
- Que la vivienda se comprase hace mucho tiempo, en cuyo caso, casi siempre se obtienen beneficios al reformar. Esto se debe, principalmente, a la revalorización de la vivienda por el paso del tiempo.
- Que la vivienda sea heredada, en cuyo caso solo hay que contar como gastos los impuestos derivados de la herencia. Este es un claro caso en el que el beneficio está prácticamente asegurado.
- Que la vivienda haya sido comprado recientemente. Aquí la cosa cambia y hay que tener en cuenta otros factores.
La ubicación de la vivienda y la demanda
Otro punto clave es dónde se encuentra la vivienda. Si hablamos de una gran capital, en el 99% de los casos se obtienen revalorizaciones importantes al hacer reforma. Sin embargo, si se trata de un pequeño pueblo o de un barrio poco atractivo, es posible que la reforma supere en costes al beneficio que puedas obtener.
Es muy fácil saber si te conviene o no hacer dicha reforma. En primer lugar, analiza la demanda… ¿hay compradores a los que les puedan interesar una casa reformada por la zona? Si no lo sabes, pregunta a las inmobiliarias de la zona para que te asesoren.
Otro punto que debes tomar en consideración es el precio de venta de viviendas similares a la tuya y a otras que estén en buen estado. Analiza la diferencia de precio y sabrás si merece la pena invertir.
Las posibilidades del inmueble
Si la zona no es un problema, hay que pasar a analizar si la casa realmente es reformable. Hay viviendas que por su mala distribución o su mal estado encarecen mucho las obras. Hay otros inmuebles que, directamente, no permiten aprovechar todo el espacio. Y el espacio es clave a la hora de revalorizar cualquier propiedad. Solicita consejo a un buen reformista para que te asesore sobre este punto en particular.
La calidad de la reforma
Por último, no solo hay que pensar en lo que se puede ganar. También hay que tener en cuenta lo que se quiere invertir. Generalmente, para que una reforma genere inquilinos o compradores, debe ser una reforma integral. Esto implica hacer obras en toda la casa y cambiar suelos, paredes, cocina y baños. De media, esto puede suponer invertir, como mínimo, unos 20.000 € para obtener unos resultados adecuados.
Por otro lado, hay una figura que pasa desapercibida en todo esto: el interiorista. Un buen decorador puede marcar la diferencia entre ganar o perder dinero. En muchas ocasiones sucede que se hace una reforma sin tener en cuenta el buen gusto. Ten en cuenta que, cuanto mejor se vea el inmueble, más estará dispuesta a pagar la gente por el.
En ReformasLaquant nos hemos topado con muchos clientes que querían, precisamente revalorizar su vivienda. Por suerte, gracias a nuestro equipo multidisciplinar formado por arquitectos, diseñadores, interioristas, decoradores, y un largo etcétera, hemos revitalizado todo tipo de espacios que han incrementado notablemente su valor de mercado.
- También te puede interesar “Cómo elegir una empresa de reformas y no equivocarse”
Claves para revalorizar una vivienda con una reforma para venderla
Si vas a vender una vivienda, lo más importante que es prestes atención a estos puntos:
- El suelo debe ser de buena calidad. No sirve un simple vinilado que tape el suelo anterior, por muy bonito que sea.
- El baño y la cocina deben estar perfectamente reformados.
- Es mejor no instalar lámparas ni ningún elemento especialmente personalizado. Así el próximo dueño podrá ponerla a su gusto, sin limitaciones previas a la compra.
- Puedes hacer una reforma del sistema eléctrico. Aunque no sea visible, si puedes aportar certificados que generarán seguridad en el comprador. Esto aumentará el precio de la casa de forma intangible.
Si buscas maximizar el valor de tu propiedad, conocer las claves para revalorizar una vivienda con reformas específicas puede marcar la diferencia, como se explica en nuestro artículo.
Reformas estéticas para captar compradores
Cuando se trata de vender una vivienda, la primera impresión es clave. Las reformas estéticas son una de las formas más rápidas y efectivas de captar la atención de potenciales compradores. Estas mejoras no requieren grandes inversiones, pero pueden transformar por completo la percepción de la propiedad. Entre las más destacadas se encuentran:
- Pintura fresca en tonos neutros: Un color uniforme y moderno crea una sensación de limpieza y amplitud.
- Suelos renovados: Cambiar o pulir los suelos puede rejuvenecer la vivienda. Materiales como vinilo o parquet son opciones atractivas y asequibles.
- Renovación de cocina y baño: Pequeños cambios, como nuevos grifos, armarios o azulejos, pueden hacer que estos espacios luzcan más modernos.
- Iluminación mejorada: Sustituir bombillas antiguas por iluminación LED o instalar luces decorativas mejora la atmósfera de la vivienda.
Estas mejoras no solo aumentan el atractivo visual de la propiedad, sino que también generan un mayor interés y disposición a pagar más por parte de los compradores.
Mejoras estructurales que aumentan el valor de la vivienda
Las reformas estructurales son esenciales para garantizar que una vivienda cumpla con los estándares de seguridad, funcionalidad y confort. Aunque suelen implicar una mayor inversión inicial, su impacto en el valor de la propiedad puede ser significativo. Algunas de las mejoras más valoradas son:
- Actualización de instalaciones eléctricas y de fontanería: Los sistemas modernos y eficientes eliminan preocupaciones de mantenimiento y atraen a compradores más exigentes.
- Aislamiento térmico y acústico: Instalar ventanas de doble acristalamiento, aislar paredes o reforzar techos no solo mejora la eficiencia energética, sino que también incrementa el confort de la vivienda.
- Refuerzo de la estructura del inmueble: Reparar grietas, humedades o problemas en la cimentación asegura la durabilidad y estabilidad de la propiedad.
- Optimización de la distribución: Derribar tabiques para crear espacios más amplios o funcionales puede aumentar considerablemente el atractivo de la vivienda.
Este tipo de reformas garantiza que la propiedad no solo se vea mejor, sino que también ofrezca una experiencia de vida más cómoda y segura, lo que se traduce en un incremento notable de su valor en el mercado.
Claves para reformar una vivienda para alquilarla a un mayor precio
Si, por el contrario, prefieres alquilar, deberás priorizar estos aspectos:
- Instala suelos sintéticos y resistentes. Nunca se sabe que harán los inquilinos, así que es mejor que el suelo aguante el tipo. Para ello se recomienda poner suelos de madera vinílicos. El acabado es fantástico, económico y resistente.
- Al reformar la cocina, pon electrodomésticos de marcas poco conocidas pero que tengan buen aspecto. Si es posible, invierte en un lavaplatos.
- Invierte una parte generosa en el mobiliario y la decoración. En este sentido, no hablamos de comprar cosas caras, sino de que la casa se sienta bien decorada y muy completa. Para ello, el estilo nórdico suele ser la mejor opción. Hay mucha variedad y gusta a todo el mundo ya que transmite paz mental.
- Pon una buena iluminación. Preferiblemente cálida pero potente.
- Si es posible, apuesta por el color blanco para muebles y paredes, con contrastes de color en la decoración. Así generarás mayor sensación de espacio.
Cumpliendo con todos estos “checks” atraerás a un público más selecto que estará dispuesto a pagar más. Además, al tener la casa amueblada y decorada, podrás optar a destinar la vivienda para alquiler de corta duración o turístico.
Elegir los mejores materiales puede marcar la diferencia al reformar para alquilar. Aquí tienes una guía con materiales recomendados para maximizar el rendimiento de tu inversión.
Cocinas y baños: claves para inquilinos
Cuando se trata de alquilar una vivienda, la cocina y los baños son dos de las áreas que más influyen en la decisión de los inquilinos. Estas estancias representan el corazón funcional del hogar y, al mismo tiempo, son un reflejo directo del mantenimiento y cuidado de la propiedad.
Las mejoras estratégicas en estos espacios pueden marcar una gran diferencia:
- Cocinas modernas y prácticas: Renovar encimeras, añadir armarios con suficiente capacidad de almacenamiento o incluir electrodomésticos eficientes son detalles que los inquilinos valoran enormemente.
- Baños funcionales y actualizados: Sustituir bañeras por platos de ducha amplios, cambiar grifos antiguos por modelos modernos y añadir espejos con iluminación integrada mejoran tanto la estética como la usabilidad.
- Materiales resistentes y fáciles de limpiar: Usar acabados duraderos como azulejos cerámicos o superficies de cuarzo asegura que estos espacios se mantengan en buen estado durante más tiempo, reduciendo problemas de mantenimiento.
El uso de materiales adecuados en la reforma de cocinas puede optimizar tanto la estética como la funcionalidad. Consulta cuánto cuestan los materiales para planificar mejor tu inversión.
Eficiencia energética como ventaja competitiva
En un mercado inmobiliario cada vez más consciente de la sostenibilidad, la eficiencia energética se ha convertido en una de las principales ventajas competitivas. Los inquilinos y compradores valoran las propiedades que les permitan ahorrar en gastos energéticos mientras contribuyen al cuidado del medio ambiente. Algunas mejoras clave son:
- Instalación de ventanas de doble acristalamiento: Reduce las pérdidas de calor en invierno y mantiene la frescura en verano, aumentando el confort y reduciendo los costos de climatización.
- Aislamiento térmico: Incorporar aislamiento en paredes, techos y suelos garantiza un uso más eficiente de la energía.
- Sistemas de calefacción y refrigeración eficientes: Cambiar calderas antiguas por modelos más modernos o instalar bombas de calor mejora la eficiencia energética de la vivienda.
- Paneles solares: Una opción sostenible que no solo reduce la factura energética, sino que también aporta valor añadido a la propiedad.
Incorporar medidas de eficiencia energética y sostenibilidad puede dar a tu vivienda una ventaja competitiva. Descubre cómo hacer una reforma sostenible para lograrlo.
¿Cuánto dinero puedo ganar si hago una reforma para vender o alquilar?
Si tu vivienda apenas de costó dinero, tiene una buena ubicación, permite una reforma idónea y se hace una buena reforma, es posible ganar mucho dinero.
Respecto al alquiler, lo habitual es que se pueda llegar a doblar el precio de la mensualidad. De este modo, a medio-largo plazo se recupera la inversión y, a partir de ahí llegan las ganancias.
Si se trata de una venta y se cumple con todos los requisitos, la media está en torno a una revalorización del 20% incluyendo los gastos de reforma. Aunque puede ser muy superior en zonas céntricas, exclusivas o muy demandadas.
Así que ya lo sabes, analiza tu proyecto, asesórate bien y deja la reforma en manos profesionales que te permitan ganar el máximo posible. Es nuestro consejo como expertos en reformas con más de 25 años de experiencia.
¿Tienes en mente una reforma?

Estamos en
Dirección: C/ San Fernando 52, Entreplanta
03001 – Alicante
Teléfono: 966 29 10 10
E-mail: info@laquant.es
presupuestos@laquant.es
ReformasLaquant