¿Para qué obras hay que pedir licencia o permiso?

Tipos de licencias de obra que hay que pedir

Es de conocimiento general que las licencias de obras se solicitan siempre al Ayuntamiento de la localidad en la que se vaya a llevar a cabo. En este sentido, se pueden solicitar tres tipos de permisos dependiendo de la amplitud que tenga el proyecto. Estas licencias de obra se piden independientemente de que se trate de un edificio, un local, un piso, un chalet, etc. Es decir, afectan a todo tipo de obra en un inmueble y son las siguientes:

• Licencia de procedimiento ordinario común. Son las que afectan a grandes estruturas y suponen los mayores cambios. Por ejemplo, hablamos de cambiar la fachada de un edificio o crear hueco para poner ascensores.
• Licencia de procedimiento abreviado. Estas incluyen obras importantes pero no tan grandes. Una forma sencilla de diferenciarlo sería poner un ascensor para el que ya existe un hueco amplio.
• Licencia por comunicación previa. Aquí se aglutinan todas las obras de menor escala. Por ejemplo, cambiar las ventanas o pintar la fachada.

Además, también existen las obras que no necesitan permiso del ayuntamiento. Sin embargo, se recomienda cautela: si la obra afecta a la comunidad de propietarios, habrá que solicitar un permiso en junta de la comunidad de vecinos para poder llevarla a cabo. También cabe añadir que este permiso se debe pedir en obras que requieran licencias del ayuntamiento.

Obras que requieren licencia de procedimiento ordinario común

Todas las obras, tanto de edificios completos como de propiedades, que requieren un permiso ordinario común son:

• Elementos protegidos. Todas aquellas remodelaciones o cambios que puedan afectar a un elemento protegido como patrimonio. Un ejemplo son las casas históricas.
• Cambios en la fachada. Todas las obras que supongan realizar cambios estéticos o estructurales en la fachada de la vivienda o edificio.
• Modificación del uso del inmueble. En caso de acondicionar un inmueble para cambiar su uso de locales a viviendas y viceversa, se incluyen todo tipo de obras.
• Incrementar el número de viviendas o locales. Todas las modificaciones que supongan volver a parcelar las viviendas o locales de un inmueble.
• Obras de consolidación. Todas las obras que supongan sustituir elementos o reforzar los existentes de la estructura del inmueble. Por ejemplo, en caso de aluminosis.
• Obras de re-configuración. Aquellas obras destinadas a eliminar problemas del edificio, formalmente denominados “impactos negativos”. Por ejemplo, volver a impermeabilizar el techo de un ático.
• Acondicionamiento general. Todas las modificaciones que supongan redistribuir el espacio interior de un inmueble y que no afecten a la estructura o a la fachada del edificio. Eso sí, afectaría a cualquier otro tipo de paredes, suelos, alturas, etc.
• Reestructuración general. Cualquier obra que suponga modificar la estructura del edificio en su totalidad. En esencia, se trata de vaciar un edificio y dejar en pie solamente la fachada.
• Reestructuración parcial. Cualquier obra que suponga modificar la estructura del edifico en parte. Por ejemplo, abrir hueco para poner un ascensor, demoler y construir escaleras, abrir patios o incrementar su área, construir una entreplanta, añadir o eliminar pisos, etc.

Obras para las que hay que pedir licencia de procedimiento abreviado

Aquí se integran obras de menor calado que en el punto anterior, aunque no dejan de ser obras importantes. Todas ellas son:

• Instalación de andamios en la calle. Por ejemplo, es posible que para una obra del apartado anterior, o de este mismo apartado, necesites poner andamios. En ese caso deberás solicitar este permiso junto al de la obra que vayas a realizar.
• Cerramientos y acristalamientos. Ya sean de terraza, patio, ático, porche u otra estancia, cuando se va a realizar un cerramiento de cualquier tipo hará falta este tipo de licencia.
• Construcción de piscinas. Ya sean climatizadas o abiertas, ambas requieren de licencia de obra abreviada.
• Reestructuración puntual. Hablamos de obras que supongan cambiar la distribución de la vivienda al abrir huecos en muros, la construcción de rampas, poner vallas, instalar ascensores en huecos aptos que no requeiran demolición o unir pisos privados mediante escaleras.

¿Para qué obras hay que pedir licencia de obra por comunicación previa?

Las obras, reformas y modificaciones que requieren de una comunicación previa al Ayuntamiento son:

• Volver a tejar la cubierta del edificio o casa.
• Sustituir ventanas.
• Pintar la fachada.
• Redistribuir la vivienda sin tocar los muros de carga o la estructura del edificio.
• Cualquier obra de exterior como instalar una ventana de techo (más conocida como Velux) o cambios los canalones.

¿Qué obras no necesitan licencias?

Así pues, solo queda una cuestión que responder, cuáles son las obras que no necesitan de un permiso para poder hacerlas:

• Sustituir los alicatados.
• Cambiar los solados.
• Realizar pintura en interiores.
• Alisar paredes y quitar gotelé (siempre que sea en interior).
• Lijar el parquet.
• Sustituir el interior de la red de suministro de agua o de evacuación de agua.
• Sustituir la red de electricidad.

Fianza por la Gestión de Residuos

En cualquier caso, hagas la obra que hagas, lo más habitual es que generes una buena cantidad de residuos. En ese caso es importante que pidas al ayuntamiento el permiso para que una empresa licenciada los gestione. Para ello deberás depositar una fianza que te será devuelta al verificar que no hay residuos una vez finalizada tu obra.

Es importante que para la reforma de tu vivienda, cuentes con una empresa de reformas profesional, ya que con ello te asegurarás que tu inversión merezca la pena.