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A la hora de hacer una reforma completa del hogar o de un negocio, hay muchos estilos entre los que elegir. Entre la amplia gama disponible, uno destaca sobre el resto: el estilo vintage. A diferencia de otros movimientos decorativos, este se caracteriza por ser de los más sencillos de llevar a cabo debido a varias razones. En primer lugar, es muy versátil, pues admite gran variedad de elementos. En segundo lugar, es muy asequible, ya que hay mucha disponibilidad de mobiliario, materiales, etc. Todo ello debido, precisamente, a su variedad. Por último, es un estilo que no requiere grandes conocimientos en decoración. Por todo esto y mucho más, hoy te contamos cómo hacer una reforma integral al estilo vintage.
¿Qué es el estilo vintage?
Antes de entrar en materia, cabe señalar que lo vintage se define como algo que, “a pesar de no ser nuevo, está de moda por su diseño atractivo”, según nos indica Oxford Languages. No obstante, en el mundo de la decoración esta definición se queda corta. Hoy en día se venden muchas cosas de primera mano diseñadas 100% al estilo vintage, por lo que también entrarían en esta categoría aquellos elementos que simulan ser antiguos. En suma, el estilo vintage se caracteriza por basar su diseño en elementos que recuerden al pasado, combinados con elementos actuales y colores inesperados. Es lo que se conoce como retro-moderno.
Ahora bien, aunque es fácil encontrar el estilo vintage en muchas tiendas de primera mano, si somos puristas, la clave del estilo está en la autenticidad. Cuanto más auténtico sea un artilugio, más vintage se podrá considerar. Esa es, en esencia, la gran dificultad de este estilo decorativo. Si quieres conseguir una casa a la altura, será mejor recorrer anticuarios y tiendas de segunda mano hasta dar con los elementos perfectos. La alternativa más económica, sin embargo, es acudir a plataformas online donde es muy fácil encontrarlo, aunque quizás el resultado será más genérico.
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Las claves para reformar con estilo vintage
Al hacer una reforma se tocan muchos elementos del hogar, aunque para que el estilo vintage brille con luz propia, hay que centrarse principalmente en:
- La vivienda. Quizás lo más importante y lo más difícil de conseguir. Donde mejor encaja este estilo es en su propio contexto. Por eso, la mejor opción para aplicarlo es en una casa antigua que tenga techos altos, vigas de madera, vistas, ladrillos, chimenea, etc.
- Suelo. Un suelo vintage es aquel que tenga un aspecto envejecido. Destacan sobre todo las baldosas de barro con patrones coloridos, los pavimentos con mosaico o las maderas nobles con muchas vetas y matices.
- Techo. Este estilo disfruta más con los techos altos y las vigas de madera vistas. Otra opción muy interesante son los techos aboardillados.
- Muebles. Respecto a los muebles, siempre acertarás con diseños que recuerden a otras épocas, con al menos dos décadas de antigüedad y que se encuentren en buen estado.
¿Cómo reformar una cocina al estilo vintage?
Al reformar una cocina con un estilo antiguo pero actual, cabe señalar que lo más apropiado es enfocarse en el suelo y las paredes. Estas quedan fantásticas con baldosas de patrones simétricos y con azulejos con relieve respectivamente. Respecto a los muebles, no pueden faltar las maderas antiguas desnudas o con colores claros.
Respecto a los electrodomésticos, la elección es más difícil. Si quieres aunar calidad y diseño, opta por una cocina de gas. Para solventar que la nevera, el lavavajillas o la lavadora desentonen, puedes poner una puerta o tapa ajustada al aparato, de modo que no se vea su diseño actual.
En cuanto a la decoración, prueba con poner paños de cocina bonitos a la vista, utensilios en madera colgando o incluso una vitrina con vajilla y cristalería.
Baños con una reforma vintage
Los baños siguen un estilo similar al de las cocinas: azulejos con relieve y suelos de baldosas con patrones. Si puedes optar a ella, una bañera de patas es la mejor de las opciones. Además, no puede faltar un mueble antiguo para el lavabo ni un espejo que grite “vintage”. Para decorar, puedes poner la manivela de la puerta en cerámica a juego con la grifería. Otro elemento que queda muy bien son los metales envejecidos. Eso sí, opta por colores claros y cálidos. Recuerda que el baño es una estancia pequeña y cuanta más luminosidad pueda tener, mejor.
¿Cómo decorar un salón al estilo vintage?
Para los salones, las habitaciones, los cuartos de estar, los estudios y los despachos se siguen las mismas pautas. Se recomienda que los suelos sean de madera, pues resultan mucho más hogareños. La alternativa a ello es mantener el suelo de la cocina para toda la casa, puedes puede quedar increíble. Para las paredes es mejor optar por colores claros como el pastel o, para ganar en luz, directamente blanco. Como bien sabes, los muebles cuanto más antiguos mejor. Aunque en este sentido siempre puedes apostar por hacer una mezcla interesante entre muebles actuales y antiguos.
De todos modos, la clave de este estilo radica en las formas orgánicas y naturales. Olvídate de muebles excesivamente rectos. Lo mismo se aplica a la decoración. Prueba a poner elementos de otras épocas como:
- Lámparas de aceite (aunque no sean reales).
- Muchas cajitas de diferentes tamaños, formas y materiales.
- Una mecedora en mimbre.
- Alfombras clásicas.
- Una chimenea.
En realidad, aquí cabe todo aquello que seas capaz de integrar adecuadamente. Por cierto, un truco fantástico es que la televisión se encuentre dentro de un mueble con puertas. Quedará tan auténtico como lo era hace décadas y ocultará un elemento tan moderno con mucho estilo.
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